No puedo dormí, esa es la verdás. Me levantao ya tres vese a bebé agua fresquita. Mi jefe no pone el aire acondisionao en la ofisina porque dise que no ta la cosa pa hasé más gastos. Un goterón me cae por la frente desde el osipital deresho que ma va recorriendo to la cara xunga que tengo ara mismo.
¿Qué hago? "Escríbete argo en el bló" me susurra mi interió....y yo que soy mu obediente con mi interió, porque según disen la bellesa interió es lo más importante, yo le hago caso y me dispongo a escribí...
¿Y qué escribo? Un poema verticá? Po enga sí....
Toma mi aroma vestido de azul,
escribe tu nombre de color rojo,
Quita el dolor que de negro se viste,
únete a mi, vestida de blanco,
insta al hombre de morado a que se calle de una vez,
escucha a la esperanza manchada de verde,
rezándole al vino que tinta de rosa,
ocultando la vista a quien brinda con el arcoriris.
Mas allá de ti, estás tú misma,
igual que yo estoy, siendo parte de tí.
Ve donde el sol no es amarillo,
igual el anochecer se ha cansado del naranja,
dando sabor a tu sonrisa,
amando los contrastes de tu espalda.
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